martes, 15 de enero de 2008

"LA CARNE EN TI"




Parte uno

16 de enero del 2008.12:01 p.m.

Ni cuenta me di cuando las cosas se me salían de las manos; decía hundió en la incertidumbre ya con una familia tradicional a pesar del carácter liberal, y con un capital lo bastante bien para sobrevivir a sus 33 años, en aquella cuidad llena de asfalto y ruido y atrapada en la monotonía, el sexo cada vez se hacia mas un vicio la infidelidad de la carne seguía viva aunque el corazón ya pertenecía a alguien ,como cada seis meses había esa reunión donde se le seguían los hilos a la gente de antaño, esto cada vez me incitaba mas a verte otra vez; jamás imaginaba encontrarme a esa otra persona cargada de belleza y enormes pechos jugosos mas la cara tierna, su mirada era cautelosa los colmillos ya arrastraban al suelo mientras; el, arrogante e insensible se doblegaba ante esa luz que se desprendían de los ojos, la cena estuvo excelente entre risas y vino la platica se tornaba amena, como siempre un reloj indicaba que ya todo terminaba y algunos argumentos quedaban en el tintero, justo cuando se levantaba la mesa en ese pasillo que conducía a la cocina estabas tu y no resistí a acercarme a ti ,aunque la mujer dueña de mi corazón estuviera distraída, era mas el imán que me atraía como hierro hacia ti, cuando me acerque a ti ;el ,me vio el con esa mirada de recelo igual que lo hacia antes como invitándome a que continuara pero por dentro incitándome que me alejara, obedecí a nadie y sonreí y te apreté un seno, tu respiro se acelero y camine con dirección a la cocina para disimular que mi pene estaba erecto ,en la sala eran abrazos y risas, mientras que en la cocina yo ardía pensando en ti sin antes acordarlo te acercaste a mi de nueva cuenta y me hesite entender que la historia se repetiría, dando paso a que mi mente viajara tiempo atrás y elevara mi excitación ,pensar en ti era y es el vértigo ahora me doy cuenta de ello, ya con dirección a casa el silencio reinaba dentro del vehículo ,tu estabas sembrada en la ira y me soportabas porque me amabas yo me aprovechaba de eso y a la vez me lastimaba continuar con el juego ,sin embargo te hice reír y de la risa pasamos a las carcajadas tenia la magia suficiente como para provocar dentro de la tensión una chispa que cambiara el entorno ,llegando a casa los niños dormían y todo se prestaba a estar entre las sabanas lamiendo tu piel que era de miel, y recorrer tu cuerpo que me lo sabia de memoria pero aun así tratamos de no hacerlo como siempre esta vez, jugamos a que no te conocía y que te violaba ,el juego salio de maravilla y pude probar tu miel derramándose en mi boca tu gemías como si tuvieras un hierro candente en la piel, las cosas salieron bien, y al final cuando pensaste que ya dormirías te ataque una vez mas esta vez fue mas delicioso después de tanta carne ,me levante a preparar un café negro y me senté en el balconcito para observar el cielo la lluvia de focos me hacia inevitablemente pesar en ti, pensaba en todo ese momento y al pensar en eso se me vinieron todos las carnes que tenia antes y que yo mismo decidí alejarme, pensé en el caos que provocaría en lo que tenia sembrado ahora si volviera otra vez a lo de antaño ,miraba atrás y tenia el hogar los hijos y el capital que ansiaba tanto, miraba hacia delante y presentía un caos de carne ,de piel de las manos de fuego, nunca imagine caer en lo mismo me repetía constantemente y recordaba con desilusión que a “los perros hueveros ni aunque les quemen el hocico”me metí a la cama y entre el pensar me venció el sueño, cuando comenzó el desfile de imágenes me veía envuelto entre la carne furtiva y el placer efímero que siempre me brindaban los demás, me encantaba estar así el fango era mi colchón en ese momento, me decía que las cosas se complican si el afecto se limitan a los momentos de pasión ,no era fácil llevarte a las sabanas pero cuando lo hacia yo gobernaba te atrapaba en mis llamas y aunque fuese prohibido lo gozabas tanto como yo ,todo era infinito cuando estábamos los dos y tan efímero cuando me derramaba en ti ,tu piel ya flácida me incitaba a buscar carne mas joven, tus senos derrumbados me provocaban risa y lo disimulaba aunque de vez en cuando mi mente perversa te visualizara con amigos en las sabanas no se en que momento desperté y ya estaba pensando en ti… continua(limas 2008)

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